Fernando estaba en 2º de EP, y aquella tarde, entre otros deberes, tenía que aprender unas rimas.
Decidí que bajaríamos a jugar a botar la pelota, algo que a él le encantaba. Mientras la botaba, le iba recitando las rimás hasta que las aprendió y entonces era él quien las decía con facilidad.
Sin darse cuenta, había hecho parte de sus deberes y disfrutado mientras los hacía. Además, demostró que puede hacer más de una cosa a la vez.
Bueno, no aprendió a botar la pelota tan bien como el de la foto, pero...estamos en ello.
viernes, 3 de julio de 2009
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2 comentarios:
Si que és verdad que jugando se aprende mejor,yo lo he podido comprobar en mi hija también con dislexia.
El blog está muy bien,me he sentido identificada en algunas cosas y me ha emocionado.
Saludos
Muchas gracias Meryjou, ahora resulta que tenemos más cosas en común que las que creía.
Todo está por descubrir.
Si te apetece, aporta tus experiencias.
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